Nos gusta hacerlo todo nosotros mismos, así que también decidimos ofrecer nuestras propias mermeladas y jaleas para acompañar nuestras tostadas a la plancha, nuestros cruasanes a la plancha y esos deliciosos gofres belgas que tanto gustan.
Bizcoba
«Bizcoba» es el nombre que se da por estas tierras al fruto del Espino Albar (Crataegus monogyna) también conocido como «majuelo», «escambrón» y «gapamina» en otros sitios. Es muy abundante en nuestra sierra. Su fruto rojo tiene muy poca carne y una pepita bastante grande pero produce una jalea con un agradable sabor entre el membrillo y la fresa con suaves toques cítricos y un final balsámico con leves notas maderizadas y un contrapunto de ralladura de limón.
Escalambrujo
El fruto de la Rosa Mosqueta (Rosa eglanteria) es un cinorrodón con muy poca pulpa y muchas pepitas y pelillos que se clavan en la lengua como agujas, lo que lo convierte en prácticamente incomestible. No obstante, con mucha paciencia y varios filtrados se puede conseguir un precioso jarabe color rojo cobrizo con que recuerda a la mermelada de rosa, lo que no es de sorprender, aunque resulta más aromático y complejo, con toques a frutos rojos y un final meloso y potente.
Mora y endrina
La Zarzamora (Rubus ulmifolius) abunda en nuestra zona, donde produce unos frutos pequeños de sabor concentrado. No obstante, adolece de acidez, así que le añadimos un pequeño porcentaje de Endrinas (Prunus spinosa) para darle un carácter un poco más mordiente. El resultado es una mermelada realmente deliciosa, de la que hacemos una versión más líquida para poder servir con nuestros gofres.
Paltomiel
El paltomiel es originalmente un jarabe medicinal que se hace y vende comercialmente en Chile para tratar la tos. Sin embargo, resulta ser un sirope perfecto para acompañar gofres y pancakes. Se elabora hirviendo huesos de Aguacate o Palta (Persea americana) en agua durante varias horas, dejando que se reduzca y mezclándola con miel (en nuestro caso, evidentemente, de nuestra sierra). El resultado es un jarabe que se presenta como un digno rival del sirope de arce canadiense.